Propagación vegetativa por estacas de ocho especies forestales

Abstract

La Dasonomía Tropical requiere de la propagación agámica para hacer mejoramiento genético de árboles poseedores de características deseables. El presente estudio intentó conocer la capacidad de las especies Acrocarpus fraxiniforlius Wight, Cedrela mexicana Roem, Cordia alliodora (Ruiz & Pavon) Oken, Eucalyptus deglupta Blume, Simarouba amara Aubl, Swietenia macrophylla King, Tabebuia rosea (Bertol) DC y Toona ciliata M.J. Roem var. australis (F.v.M.) C.DC. para propagarse vegetativamente. El estudio consistió en probar el efecto de un fitorregulador en polvo sobre el enraizamiento de estacas de tres tipos distintos, bajo condiciones de invernadero. Se efectuó en el vivero del Departamento de Ciencias Forestales del CATIE, en Turrialba, Costa Rica. En general, se emplearon ramas del tercio superior de copa de árbol. Cada rama produjo tres estacas distintas: apical, sub-apical y basal. Las estacas de cada tipo fueron de dos niveles: tratadas con "Rootone-F" y testigos. Todas las estacas, sin hojas, midieron 20 cm de longitud y fueron plantadas verticalmente en un medio esterilizado (tierra y arena 1:1 sobre aserrín nuevo de madera) contenido en cajas de madera acondicionadas en invernadero, bajo riego por nebulización intermitente y mediana luminosidad. El ensayo duró doce semanas: del 3 de mayo al 30 de julio de 1975. Se obtuvo éxito en tres especies, en este orden de importancia de enraizado: Toona ciliata var. australis, Tabebuia rosea y Acrocarpus fraxinifolius. En estas especies, el "Rootone-F" estimuló adelantando y aumentando la Producción de raíces en un mismo tipo de estacas, presentando mayor capacidad de enraizamiento la estaca de tipo sub-apical, seguida de los tipos basal y apical. A las doce semanas, se encontraron estacas latentes (sin y con "callo") en cantidades variables entre las ocho especies. De las cinco especies no enraizadas, Cordia alliodora, Swietenia macrophylla y Cedrela mexicana, en ese orden de importancia, presentaron las mayores tasas de latencia. La mortalidad de estacas varió de una a otra de las ocho especies, presentándose las más altas tasas en propágulos de Simarouba amara y Eucalyptus deglupta. De la octava semana al final del ciclo variaron las condiciones del medio ambiente, provocando desecamiento, defoliación y muerte de las estacas.