| dc.description.abstract | En respuesta a la crisis agrícola, económica y social causada por la mosca blanca (Bemisia tabaci) en América Central y el Caribe desde mediados de los años 80, en 1992 se inició el Plan de Acción para el Manejo de Moscas Blancas y Geminivirus, cuyo eje estratégico es la validación y transferencia de tecnologías de manejo integrado de plagas (MIP) hacia los agricultores. Este artículo discute los logros alcanzados en el primer decenio de su funcionamiento, resultantes no solamente de la labor de las Comisiones Nacionales que participan en el Plan, sino también de numerosos funcionarios y entidades que efectúan labores de validación y transferencia, investigación, diagnóstico o capacitación. El principal logro es que tanto los técnicos como los agricultores conocen mejor el complejo mosca blanca-geminivirus en sus aspectos bioecológicos, agrícolas, económicos y de manejo. Además de este mejoramiento de percepción, que favorece la implementación de programas de MIP, ellos conocen nuevas tácticas y sus combinaciones para el manejo del problema. Pero también ha habido valiosos aportes conceptuales y metodológicos en cuanto a métodos de investigación participativa para favorecer la adopción de algunas tácticas de MIP. Asimismo, sobresalen las exitosas campañas fitosanitarias de la República Dominicana, México y Cuba, así como algunos aportes de tipo técnico en el mejoramiento genético de tomate y frijol, y algunas prácticas agrícolas (producción de plántulas en semilleros cubiertos con malla y coberturas al suelo). No obstante, hasta ahora los logros han sido desuniformes entre los países y existe la necesidad de aumentar la cobertura de los programas exitosos de MIP. | es_ES |
