| dc.description.abstract | Este estudio tuvo como objetivo probar el método de obtener, mediante la percepción de los niños de primero a sexto grado de escuela, información sobre cómo, con qué frecuencia y quien sanciona en la familia el comportamiento de los niños. Se seleccionaron 95 sujetos al azar, de ambos sexos, entre 7 y 13 años de edad, representando todos los grados de la escuela primaria de Tucurrique, que vivían con sus padres. Se empleó como instrumento de recolección, un cuestionario con dibujos motivadores, fue aplicado por grupos. Se elaboraron 9 hipótesis de las que debieron ser rechazadas las que relacionaban edad con uso de sanciones positivas y negativas, con frecuencia de uso de sanciones negativas corporales y de razonamiento y con empleo de castigos corporales directos, amenazas de pérdida de cariño, privación de bienes materiales y uso de burlas o ridiculización. En todos los casos se observó que el empleo de dichas sanciones, no guardaba relación directa ni inversa con la edad de los niños. Dentro de los límites impuestos por la muestra, se demostró que los padres eran considerados como agentes punitivos más severos que las madres y existía preferencia con los padres por aplicar sanción inmediatamente después de cometida la falta. La información de los niños permitió elaborar una escala de severidad de sanciones donde castigo físico fue clasificado como la más severa. También esta aparición como la técnica punitiva más empleada en la mayor parte de las áreas. La experiencia dio oportunidad para evaluar ventajas y limitaciones impuestas por el método y aconsejó los aspectos que deben enfatizarse cuando se emplea a niños como fuente de información. | es_ES |
